sábado, 16 de enero de 2010

Condenas y condenados

"Condenados aquellos que, en queriéndose salvar, condenan por doquier sin cumplir la condena que por derecho merecen".

Son como larvas que crecen por todas partes. En cuanto levantas una piedra salen a patadas los trapos sucios de hace años y no tan años. No hablemos de conspiraciones totales que cumplen las veces de una estructura paranoide, es mucho más sencillo que todo eso.

Como periodista que aspiro a ser, debo oponerme al si tú te callas yo me callo de la elegancia protocolaria de quien cobra para decir lo que se debe creer. Hay algunos que creen a pies juntillas esto de votar para no pensar; echa la papeleta y allí ella ya hará lo que tenga que hacer. Pero lo malo es llegar a la situación en la que un político asume ese papel y se cree con el derecho de poder pensar por los demás, diferenciar el bien y el mal, y sentirse obligado al mangue sin tapujos adjudicándose lo necesario para llegar al nivel de vida que cree merecer.

¿Pero consiste tan sólo en robar? El sistema no funciona y aquí el dinero no sólo pasa de mano en mano, sino que cambia los resultados electorales. Adjunto el link a la noticia de las declaraciones del portavoz socialista Alonso acerca de la condena a dos periodistas de la Ser. Primero porque me parece muy bien que se persiga el rigor de la información a la hora de cumplir con las obligaciones que se tienen como profesionales del periodismo y segundo para que se tome resoluciones según este principio. Ni más ni menos.
Imagen: La cara que se le queda a uno cuando escucha "tamayas" tonterías y gana el Atleti por 5-1.

1 comentario:

Ángel-Z dijo...

Una sentencia ridícula: no me ceo yo que nuestras leyes sean tan cutres como para anular el derecho a la información (veraz) para dedicarse a proteger la "intimidad" de una lista de tramposos. Y una sentencia inquietante, por cuanto puede leerse como un "aviso para navegantes" o lo que te puede pasar si te atreves a hablar de lo que "no se debe tocar".
Bueno, la sentencia está recurrida y es de esperar que el resultado sea 5-1; y que al juez se le quede la cara como al del balón. Al juez y al Fiscal General, que ha tenido una intervención para mí merecedora de pedir su cese inmediato.