viernes, 9 de enero de 2009

O eso es lo que dicen

Dicen que el recuerdo es el mejor de los regresos, que "al lugar donde has sido feliz no debieras tratar de volver", que "todo pasa y todo queda". ¿Cuál es el afán que impulsa entonces hacia la creación de nuevos recuerdos sino que al quemar los puentes que te unen al pasado, ni ellos pueden perseguirte, ni tú echar atrás? He leído un libro que hace tiempo me pareció increíble y ayer me lo volvió a parecer. Deberíamos de plantearnos entonces si lo que dicen es lo que sienten unos en vez de nosotros mismos. Si la piel de la piel en la que nos metemos todas las mañanas no es sino un individuo que requiere de sus propias reglas y métodos para alcanzar el resultado a los problemas y las inquietudes. Siddhartha de Herman Hesse ya comprendió que nunca podría enseñarle el final del camino a su hijo porque él no había recorrido su senda.

Pero el inverso es el mismo. Me preguntaron una buena mañana de dónde era. Respondí que de Huesca, Aragón. Me dijeron que los de mi comunidad estamos muy orgullosos de serlo. Dije que era cierto, me sentía orgulloso. Pero también respondí que lo habría estado de haber nacido en cualquier otra parte del mundo. ¿Qué pasa con las identidades que se fijan a nosotros como el chicle a las suelas? ¿Acaso no nos impiden caminar, son un lastre, una marca de nuestro territorio que llevamos con nosotros mismos como si eso nos hiciera diferentes? Quisiera poder decir "no me siento extranjero en ningún lugar". ¿Puede que haya gente que se oponga a esto?

Efectivamente, y como todos sabemos, la hay. Recuerdo como en un foro en catalán le echaban en cara a un amigo mío de Aragón la desgracia de haber nacido al otro lado de la Frontera. Lo cierto es que odio los nacionalismos. Ni los comprendo, ni los comparto. Apelan a lo irracional del hombre, al sentimiento de pertenencia a algo diferente. Me recuerdan a esos desfiles nazis en los que se gritaba a favor de los días mejores de los del terruño, de la superioridad racial, étnica o cultural. Lo que entiendo es que un presidente español tenga que tratar a todos los ciudadanos de igual modo, pues es el presidente de todos, y el nuestro es un país donde las exigencias autonomistas de corte administrativo vienen muchas veces motivadas por sentimientos contrapuestos de funcionalidad y cercanía al pueblo llano, o bien victimismo algunas veces justificado y un afán de superioridad difícilmente comprensible.

Si creemos en el hombre y tenemos esperanza en un futuro mejor deberíamos de aparcar esas diferencias en pro del ser humano. Sólo seré enteramente feliz el día que conozca todos los idiomas y pueda viajar por todos los pueblos sin sentirme odiado o fuera de lugar; y sin embargo, Hoy en Día, todavía hay algunos que quieren matar por ideas que no alcanzan a ser tales en ningún caso. Supongo que nunca dejará de ser así.
Imágenes: Un hombre mayor con la bandera del pollo y una manifestación en Cataluña donde queman la foto de los reyes. Que conste que soy republicano, pero nunca he aceptado este tipo de actos de los que sólo son montadores de follones, nada más.

4 comentarios:

Alanthos dijo...

Sabes lo que opino de los Nacionalismos. Sabes que me parecen peligrosas formas de afirmar la superioridad absoluta de uno por el mero hecho de "ser de aquí". Personalmente, servidor (que también es aragonés, y a honra, muchas gracias), piensa que lo del Estado de las Autonomías se les fue de las manos desde el principio a todos. Servidor piensa también que Ya Vale De Tanta Tontería y que no merece la pena emplear la "Deshistoria" (historia + desinformación = deshistoria) en una guerra civil que terminó hace unas cuantas décadas. Servidor, además, opina que ya va siendo hora de que los políticos de la Oposición y los del Gobierno intenten llevarse mejor, y, de paso, centrar parte de sus malos rollos y energías negativas diversas en resolver problemas.

Como persona que soy, no obstante, reconozco el valor de los recuerdos. De mis recuerdos, por ejemplo. No conocí a la gente que murió antes de que tuviera un mínimo uso de razón, pero la que conozco me da fuerzas para seguir currando porque, a pesar de todo, me las apaño para recordarles. Y para disfrutar de sus recuerdos.

Con el tiempo, esas personas desaparecerán, igual que yo. Seremos otras personas, personas que olvidarán a los jóvenes. Personas que vivirán envejeciendo. No obstante, lo que habremos vivido, lo habremos vivido, y lo recordaremos. Será lo que guardamos de quienes no están con nosotros, o incluso lo que se nos pasa por la cabeza cuando estamos con ellos. Será lo que viva de esas personas siempre que nosotros mismos estemos vivos. Nuestros recuerdos nos hacen, y no al revés, al fin y al cabo.

Menuda parrafada te he soltado para decir que sí, que tienes razón, que a nivel sociopolítico las cosas no van bien... pero que los recuerdos no deben desaparecer, ni dejar de valorarse. Pueden ser un ancla (como ocurre con los reaccionarios de un bando y del otro); pero también pueden ser una vela.

Me da la impresión de que estoy demasiado frívolo últimamente... Y creo que no me gusta nada.

Unknown dijo...

Hola:
Me alegra que me halla dejado un mensaje en mi blog, en efecto creo que le interoso en topico, aca le dejo el enlace al comentario sobre su comentario:
cramon-filosofia

Ángel-Z dijo...

Ah, el nacionalismo... eso que divide, que separa, que traza la raya de los que sí y los que no, de buenos y malos (casualmente nuestro lado siempre es el bueno, jajaja), privilegiados y desfavorecidos, de los que nos importan y los que allá se pudran; esa cosa que los adictos al poder necesitan aliñar con sentimientos un tanto irracionales y primarios para buscarte un enemigo contra el que ir, del que tus jefes te van a defender; bien está el respeto a lo diferente; eso por supuesto; pero poco tiene que ver con trazar una frontera, con la defensa de lo excluyente; está bien el recuerdo, el cariño al sitio que te vio nacer, o donde pasas la vida; pero poco tiene que ver eso con la visión paleta, egoísta minimalista del mundo.
Pero...todo esto a qué venía? jajaja!! Ah sí, un abrazo.

Achilles dijo...

Jelou Carloooos (soy Koldoman) (lo de Achilles es por el anticarro inglés)(el M10)

Comento, aunq no tengo mucho q decir, pq comparto tu opinión de arriba a abajo. Lo de siempre, q el nacionalismo se crea en base a la distinción del otro, en base al establecimiento de un ente distinto contra el q se afirma la propia cultura (o "cultura"). Y q qué penoso es éste país en el q se está construyendo un Etdo federal en torno al nacionalismo, todos considerándose etnias y razas diferentes. Como si bailar jotas o hablar euskera les hiciese humanos diferentes...
Q risa. Y q pena.

xauu nos vemos